El Yoga Restaurativo es el ¨arte de parar¨ y escucharnos hacia dentro. Todas las prácticas de yoga, realmente, implican esto, pero en especial, lo hace el Yoga Restaurativo.
Así la intención es restaurar la relación entre acción y relajación, para que podamos vivir nuestra vida, pese a la actividad de la vida diaria, con calma.
Actualmente nos movemos en una sociedad en la que los ritmos son acelerados: los objetivos laborales, los horarios de trabajo, escuela, las cosas que hay que cumplir, las exigencias que nos imponen o autoimponemos… y mucho más. Con todo ello, parar es algo que incluimos en un alista de tareas. Y a veces incluso nos sentimos mal permitirnos parar.
En la mayoría de los casos cuando conseguimos parar, ni si quiera sabemos hacerlo, ya que parar es seguir estimulando la mente con series, móvil o incluso un hobby. No sabemos estar en silencio, con nosotros mismos, despiertos, conscientes, sin hacer nada, contemplado lo que hay.
Y lo que hay a veces es mas agradable o menos agradable, el yoga restaurativo propone ver lo que hay, sea lo que sea y no darle la espalda, si no que a través del asana ( postura), la unión cuerpo/ mente y la respiración y la intención ir aceptando y sanando.
Se trata e ir recuperando espacios en el interior del cuerpo y de la mente y hacerlo sin prisas, dándonos tiempo de parar y sentir, y ser a la vez testigos y participantes del proceso de restauración de nuestro cuerpo y mente.
Gracias al yoga restaurativo recuperamos la habilidad para relajarnos, y poco a poco, practica tras práctica, llevar lo integrado en clase hacia auna vida diaria más serena
Esta practica te puede ayudar a:
- Aliviar dolencias
- Gestionar dolencias crónicas
- Regular el Sistema Nervioso y Endocrino
- Mejorar el Sistema Inmunitario
- Liberar la respiración
- Fortalecer el corazón
- Desarrollo de la sensibilidad y la a tención sostenida
- Flexibilidad en articulaciones
- Mejora de la calidad del sueño
- Mejora la gestión emocional